Lee atentamente las preguntas y marca la alternativa que corresponde.

INTERPRETACIÓN DE LECTURA

Vivimos en un mundo que funciona por modas, la ropa, los peinados, los autos y hasta las manifestaciones culturales son efímeros, lo que hoy causa furor y es imprescindible poseer o escuchar, mañana pasa al olvido y pierde toda la importancia que pudo tener.
Sin embargo cuando nos percatamos que los maestros del barroco o el clásico compusieron hace siglos, en otro continente, para otra gente y que a pesar del tiempo transcurrido siguen estando vigentes, que son parte de la cultura de todos los países, que una gran mayoría de personas puede al menos tararear el tema del Himno a la Alegría cuando son incapaces de recordar que se bailaba hace 5 años, y su música es apreciada por un público en lugares que ni siquiera estaban en el mapa cuando estas obras fueron compuestas, nos preguntamos ¿por qué? La respuesta como siempre es simple y compleja a la vez, por una parte se puede decir que lo bueno perdura, que la calidad no pasa de moda o hasta que es bonita, pero no debemos quedarnos ahí, hay motivos más profundos que convierten a la música clásica en atemporal. El ser humano necesita elementos en su vida cotidiana que vayan más allá de sus necesidades culturales básicas, la gran música transmite una serie de ideas y de emociones que van directamente a lo más hondo del corazón y a su vez de la inteligencia, y pienso que esto es lo que hace a la música clásica trascendental, este poder llegar a todas las partes que conforman nuestra sensibilidad, porque a la vez podemos sentir alegría, melancolía, tristeza, espíritu de lucha o hasta ganas de bailar y al mismo tiempo apreciamos la maravilla de la forma, la riqueza de la orquestación, la perfecta estructura que hace que las grandes obras no pierdan la capacidad de abolir el tiempo y la distancia.

RELACIONES ANALÓGICAS

Marca la alternativa que cumpla con la relación establecida en las palabras base.

TÉRMINOS INCLUIDOS

ANTÓNIMOS EN CONTEXTO

Marca la alternativa correcta que corresponda al antónimo de la palabra subrayada.